lunes, 31 de julio de 2023

RYU MURAKAMI: AUTODESTRUCCIÓN Y POESÍA

 

Podría decir que es una de las novelas más perturbadoras que he leído, pero estaría  mintiendo y además precisamente este libro me ha recordado que no hay libros ni palabras perturbadoras, sino maneras perturbadas de leer esos libros y esas palabras. 

A mis 61 años y en un mundo que la mayor parte del tiempo me parece más falso que el alma del propio Judas -quien por otra parte siempre me ha parecido un cabeza de turco como otro cualquiera y un elemento imprescindible sin el cual la narrativa no avanzaría ¿Qué sería de los traicionados sin los abnegados traidores?-, considero un regalo toda posibilidad de que algo me saque de la monotonía previsible y ponga en fuga al último residuo de puritanismo imbécil que todavía puedas ocultarse en alguna parte de mis pensamientos desde la que espera agazapado para pillarme desprevenido dispuesto a gritarme sus gilipolleces. 

Reconozco que me ha costado superar las veinte primeras páginas de vómitos y orgías de este libro. Consiguieron dejarme tan asqueado como para plantearme algo que para mí es un sacrilegio: dejar un libro a medias. Puedo dejar una película a medias, pero un libro no. Quizá porque.en definitiva la película me impone sus imágenes, pero lo que yo decida ver cuando leo un libro es asunto mío. 

Así que durante unos minutos, cerré el libro y estuve a punto de abandonarlo. Afortunadamente no lo hice. Volví a abrirlo, y tras pasar por una orgía aúnas brutal que las anteriores confiando en que todo eso iba a conducirme a aprender algo, en algún momento los personajes dejaron de drogarse, vomitar, follar, volver a vomitar y volver a follar, y empezaron a quitarse sus máscaras para mostrar toda su vulnerabilidad, todo su dolor, toda su desorientación y desvelar su profunda angustia al saberse irremisiblemente perdidos. 

Y entonces empezó a entrarme en vena toda la poesía de este saludablemente indigesto y recomendable monstruo novelesco que es Azul casi transparente. Hasta llegar al último capítulo y ver lágrimas corriendo como un torrente entre todas y cada una de esas líneas. Hasta quedarme atrapado en la última frase, esa ingenua confesión del autor diciéndole a Lilly lo que le gustaría  decirse a sí mismo para convencerse de que se puede recuperar lo irrecuperable, la inocencia definitivamente pérdida tras caer en la trampa de escribir y reflexionar sobre la pérdida de la inocencia en su novela. 

Así que sí, la pelea con el libro al principio ha merecido la pena, y no solo porque su narrativa aparentemente truculenta y tremendista de las primeras páginas se revela con su verdadera naturaleza de grito desesperado de vulnerabilidad cuando se hace a un lado y la poesía corre el telón de la farsa, sino porque ha servido para recordarle a los rescoldos calcinados del pudibundo puritano que todavia llevo dentro que piense un poco y no sea tan gilipollas, que ya tenemos una edad para que nos moleste lo que no es otra cosa que una visión extrema de la vida que personalmente no comparto pero tampoco soy quien para juzgar si quiero ser fiel a mi convencimiento de que en lo esencial todos somos iguales. Acojonados todos, alucinados todos, perdidos todos, ilusos todos, deliciosamente vivos y equivocados e ingenuos todos. Y todo eso es lo que nos hacer humanos. 

Esas primeras páginas no son un error. En todo caso el error estará en aquel que las lea con mala intención, con intención de juzgarlas o llevado por el morbo. En realidad esas primeras páginas duras son el primer regalo del escritor en forma de reto. Ejercen como un filtro o una especie de ritual de iniciación. Si el lector no las supera no merece disfrutar de la poética tristeza de esa última línea escrita desde una irreductible e inocente nostalgia.

Esas primeras páginas de droga y orgías brutales, de vómitos y abusos, me hacen pensar en un libro que no desea ser leído y se convierte así en espejo de sus protagonistas viviendo una vida que no desea ser vivida. 

Y a partir de ahí todo lo demás encaja: el papel simbólico del ananás podrido lanzado a los pájaros que me ha recordado, como muchos otros momentos, a la película Repulsión, de Román Polanski, y las cucarachas destripadas convertidas en recurso pictórico que podrían ser hermanas de las hormigas de Un perro andaluz de Buñuel, o el pájaro negro que vuela como una sombra sobre todas y cada una de nuestras vidas. 





WESTERN=BLUEBERRY (4): EL HOMBRE DEL PUÑO DE ACERO

 

Blueberry sigue en esta continuación de El caballo de hierro metido de lleno en la épica de los ferrocarriles, herramienta de conquista del territorio del lejano y salvaje oeste en la narrativa estadounidense, pero mirada con ojos muy europeos por Charlier y Giraud.

El hombre del puño de acero es el segundo acto de la saga dedicada al tendido de la vía férrea, una aventura que todavía no concluye en este tomo pero alcanza nuevas citas de violencia y masacre, con todo un récord de víctimas en su desarrollo. 

Es u a buena ocasión para incorporar a las fuentes de inspiración a otro maestro del western, Anthony Mann, como me señaló el otro día Telly Chavalas cuando charlábamos de cosas de comics en su casa. 

Mann, y sobre todo su uso del paisaje en el ciclo de westerns que dirigió con James Stewart como protagonistas, es fuente clásica del género muy a tener en cuenta cuando hablamos de Blueberry, como entenderá cualquiera que haya visto ese clásico del género en la pantalla grande que es Colorado Jim. 

Es interesante la forma en que los comics de Blueberry heredan la asociación de la figura humana con el paisaje trasladada de la pantalla cinematográfica a las viñetas, con Giraud adaptando a sus dibujos todas las líneas de tensión en picado y contrapicado que dominan Colorado Jim a lo largo de todo su metraje. 

La gramática de sinergia entre figuras humanas y paisaje en Mann es diferente de la que aplican otros maestros del género como John Ford, Howard Hawks, Sam Peckinpah o Sergio Leone, antecedentes todos ellos esenciales de los comics de Blueberry. 

Mann propone una relación más orgánica y en igualdad de protagonismo entre humano y paisaje que otros directores, de modo que en sus manos los paisajes retienen identidad propia frente a las figuras humanas d que entre ellos se desplazan y viven sus aventuras, en lugar de someterse a los mismos como herramienta de realce de su épica. Los paisajes de Mann poseen su propia épica a un nivel superior que minimiza y somete a los atribulados y truculentos antihéroes confusos de sus películas, poseedores de conflictos y psicologías en general más complejas que las de otros personajes de westerns de esa misma etapa. Los paisajes de las películas de Anthony Mann no son por tanto rehenes o recurso pictórico de fondo en el arco de desarrollo de los personajes, sino más bien sus compañeros de viaje. Unos compañeros de viaje que miran con cierto escepticismo a los personajes, como entes superiores a ellos que contemplan las miserias de sus laberintos. 

El otro aspecto que vuelve a destacar en esta entrega es la capacidad de los comics de Blueberry para replicar planos y ángulos expresivos del lenguaje del cine como herramienta para poner en movimiento a sus viñetas tendiendo un puente entre cómic y cine. Un terreno en el que se muestra superior a muchas películas. 





domingo, 30 de julio de 2023

TUTANKHAMÓN, EL ÉXODO, LA MALDICIÓN Y LA FUNDACION DEL ESTADO DE ISRAEL


El legado perdido de Tutankhamón. El polémico caso de El Papiro del Éxodo, se lee al mismo tiempo como un libro de especulación histórica, una teoría de conspiración y una novela de intriga y aventuras. No es mal combo para pasarse un día zambulléndose en el Egipto de un faraón hereje, los enigmas del Antiguo Testamento, las exploraciones arqueológicas de los años veinte y la trastienda de la geopolítica durante la Primera Guerra Mundial. 

Los protagonistas en uno u otro momento de esta intriga digna de una superproducción son Akhenatón, Nefertiti, Tutankhamón, Smenkhara, Ay, Horemheb, Moisés, Lord Carnarvon, Howard Carter, los banqueros Rotschild, y el bioquímico, líder sionista y presidente del Estado de Israel Chaim Azriel Weizmann. 

El tema: otra versión del Éxodo de los judíos saliendo de un Egipto que quizá no fuera el de Ramsés II, lo que podría cambiar la narrativa del Antiguo Testamento. 

El conflicto: el origen del monoteísmo y el vínculo de Atón con el Yahvé de los sashu, el Qaush de los edomitas y el Dushara de los nabateos. 

Los paisajes: el Egipto de Amarna, las ruinas de Petra y una posible nueva ubicación de la montaña de Yahvé, Sinai/Horeb. 

Y si con todo esto no es suficiente para picarte la curiosidad y aislarte con este libro de quinientas y pico página para hacer un viaje al 1300 antes de Cristo, suma una leyenda de maldiciones sobre la que planean las sombras de sospecha de varios asesinatos. 

Y otra vez la realidad superando a la ficción, en este caso a la novela clásica de terror La joya de las siete estrellas, de Bram Stoker...


... adaptada al cine en dos ocasiones: Sangre en la tumba de la momia (1971) y El despertar (1980). 




MANSIÓN ENCANTADA. CRÍTICA EN ACCIONCINE

 

Crítica Mansión encantada ★★★ - AccionCine

DETECTIVE CONAN: BLACK IRON SUBMARINE. CRÍTICA EN ACCIONCINE

 

Crítica Detective Conan Black Iron Submarine ★★★ - AccionCine

viernes, 28 de julio de 2023

HISTORIA: LA PRIMERA GLOBALIZACIÓN


Las narrativas las marcan los que ganan las guerras, cualquier tipo de información sobre el pasado, el presente y el futuro nos llega así adulterado. Es inevitable. Incluso es lógico, aunque nos repugne si dedicamos cinco segundos a pensar en la verdad. La buena noticia es que tiene fácil arreglo combatir esta pandemia de mentiras: leer, informarse, hablar, debatir, permitir que otros expresen sus opiniones aunque no coincidan con las nuestras. 

Este libro breve pero contundente y esencial, es una buena primera pieza para empezar a construir una visión más cercana a la verdad frecuentando la historia con una mirada más exigente y crítica de la que habitualmente dedicamos al pasado del que nos guste o no somos todos hijos. 

Habla de Andrés de Urdaneta, del tornaviaje, de lo que sus autores califican como el nacimiento de la globalización. Para muchos será una sorpresa. Para otros un grato reencuentro con una verdad que ya conocían pero que les apetecía refrescar. 

Es una prueba de algo que me recordó el pasado martes mi amigo Carlos, observador atento de la vida urbana desde su quiosco de la Puerta de Alcalá que le sirve como atalaya desde la que contempla y estudia, sin pretender ser un filósofo pero siendo un filósofo a pesar de todo, el ir y venir del hormiguero madrileño: la Historia no solo nos acerca a la verdad sino que además es la suma de todos los géneros narrativos que nos apasionan, desde las aventuras al policiaco, la intriga y el terror, el romance y las fábulas mitológicas, la ciencia ficción retroactiva y las leyendas negras, la biografía, la divulgación y la revelación. 

Y siempre te sorprende alimentando otra visión de las cosas. 

Aquí dejo un ejemplo:






jueves, 27 de julio de 2023

CIENCIA FICCIÓN: LA GUERRA DE LOS MERCADERES

 

Una sátira que deja tantas cosas tan claras y nos recuerda lo que pasa cuando todo lo que importa es el dinero, y comprar sueños de plástico. 

Un ejemplo:




lunes, 24 de julio de 2023

007 HOT WHEELS: LOTUS ESPRIT S1

Mi coche favorito de toda la amplia colección de vehículos de las películas de James Bond, sumergible, rodante o en negro. 

Ayuda que aparezca en una de las películas que más me divierte de la era de Roger Moore como 007 que además incluye base.de submarinos y un temazo de de Carly Simon en la banda sonora, Nobody Does It Better.





Por cierto, el blanco para pasearte con Bárbara Bach y echarle una carrera al helicóptero de la espectacular Caroline Munro estupendo, pero para uso en el mundo real mejor el negro.


sábado, 22 de julio de 2023

HOG WHEELS: TRIUMPH TR6

 







EL PLANETA DE LOS SIMIOS: LA OTRA VERSIÓN


Tenía curiosidad por ver qué aporta está versión alternativa del clásico de ciencia ficción a lo que ya conocemos a través de la novela de Pierre Boulle y el ciclo cinematográfico que inició a finales de los años sesenta el largometraje protagonizado por Charlton Heston. Y lo cierto es que algo he aprendido con esta adaptación al cómic del guión original de Rod Serling para una versión cinematográfica que no llegó a rodarse exactamente tal como él la había imaginado. 

Serling era un maestro de la narración breve de este género traducida en guiones para capítulos de televisión y algo de la predisposición natural de dicho género a decir mucho en poco tiempo que caracteriza dicho género de narración se manifiesta en su adaptación de El planeta de los simios. En la misma, como se advierte con claridad en esta adaptación de su adaptación para el cómic, usa la otra característica definitoria de su aportación a la ciencia ficción audiovisual de los años cincuenta y sesenta: el calculador y afinado dibujo de los problemas sociales de su época trasladados al territorio de lo fantástico para trabajar con mayor comodidad la crítica social y propiciar una activación eficaz de las inquietudes de la época en la mente de los espectadores, siempre sin renunciar por ello a ofrecer un intenso entretenimiento de intriga con giro sorpresa final. 

Esta variante de lo que conocemos sobre El planeta de los simios es interesante como termómetro para medir la temperatura a las diferencias entre los distintos medios y sus necesidades, aportes y carencias a la hora de adaptar una novela al audiovisual que introduce además en esa ecuación la variante en viñetas. Y desde ese punto de vista se convierte en mi opinión en una prueba del papel que tiene el azar a la hora de producir la mejor versión de una misma historia. Y por qué lo mejor no es siempre lo más fiel o lo más cercano al original, que pudo ser en su momento la mejor opción en el medio para el que fue concebida, pero debe ser reconstruida y llegado el caso modificada para el nuevo medio al que se quiere trasladar. 

Después de leer este cómic pienso que, dejando al margen la novela original de Pierre Boulle, que comentaré en algún otro post, la mejor versión de El planeta de los simios sigue siendo la cinematográfica estrenada a finales de los años sesenta del pasado siglo. Los cambios introducidos en la misma frente al abordaje de Rod Serling que recoge esta adaptación al cómic mantienen el carácter eminentemente pedadillesco de la historia al mismo tiempo que lo respaldan e incluso refuerzan con detalles que proporcionan al espectador una visión del mundo de los simios aún más truculenta y perturbadora por resultar mucho más creíble. 

La descripción de la sociedad simia de la versión Serling y de este cómic opera como sustitución simplificadora cambiando humanos por simios. Se queda asi atascada en la anécdota argumental, no progresa más allá de la misma y por otra parte presenta imágenes de carácter bastante ingenuo y antropocéntrico en las que todo gira en torno a esa sustitución. 

Así las cosas, veremos a simios pilotando helicópteros y patrullando la ciudad con uniformes de policías directamente inspirados por los que visten los policías humanos del mundo real en las metrópolis estadounidenses de la segunda mitad del siglo pasado. Eso hurts protagonismo a los simios y resta posibilidades de desarrollar una visión de ese mundo realmente reconstruido por lo simio dominando sobre lo humano. Se pierde así la posibilidad de especular sobre los cambios utilizándolos como herramienta para propiciar la reflexión sobre la civilización humana desde el territorio de la fantasía prospectiva propia de dos de las variantes fundamentales de la ciencia ficción, la distopía y la ucronía, aliadas de modo mucho más fructífero en la premisa argumental tal y como la plantea la película. 

Estamos por tanto ante un ejemplo de menos es más. Para ahorrar presupuesto la película sustituye la metrópolis de estos simios imitadores del humano del siglo XX introduciendo una sociedad simia con personalidad propia estructurada en distintas clases sociales, lo que se pierde en la versión Serling, perdiéndose también la posibilidad de jugar con los conflictos de lucha de poder entre esas clases y la reflexión sobre el intento de los militares por imponer su criterio a los científicos, conflicto latente en la sociedad estadounidense de la época.

Esa tripartición estamental, que se produce sobre una sociedad simia que replica modelos de la sociedad de la antigua Roma en un guiño a las propias pretensiones de la sociedad estadounidenses de imitar a la República de Roma tanto en sus instituciones y rituales políticos, recuerda también el orden social de la Edad Media europea, convirtiendo a los pastores, los que rezan, la cabeza del mismo, en una curiosa fusión de religiosos y científicos, haciendo de los gorilas vestidos de cuero para reforzar su aspecto siniestro (y no disfrazados de policías, figuras de orden y autoridad, como en la versión Serling y el cómic), los bellatores, que combaten, y añadiendo a los laboratores, los que trabajan. 

Ese pulso entre las clases sociales simios alimentará de conflicto a las secuelas de la película y las versiones en el cómic de este universo de ficción anteriores a la que aquí comento. 

Otro detalle significativo lo abordan los propios creadores de esta adaptación de la versión Serling en los comentarios añadidos como complemento del mismo, señalando que su modelo para el astronauta protagonista no fue Charlton Heston, sino Paul Newman, un cambio de imagen que de algún modo es también un cambio de polaridad política de la versión, representando la construcción del protagonista que saca adelante Heston una visión más conservadora, radical, enérgica y con claroscuros frente a al héroe más vulnerable y humanista que encontramos en estas viñetas. Heston sienta con su astronauta de El planeta de los simios las bases de sus tres héroes de la trilogía de ciencia ficción que completará luego con los largometrajes El último hombre vivo y Soylent Green (Cuando el destino nos alcance).

Plano por plano la película de Heston supera al comic en composición y organización de la información visual. Puede probarse comparando cuatro momentos clave en película y cómic: encuentro de los astronautas con los tótems de aviso, caza de los humanos, fuga de Taylor y encuentro final con la enigmática y terrorífica reliquia que revela lo ocurrido en el planeta. 

Y por otra parte en el cómic no aprovecharon todo el potencial del concepto metrópolis simia a la hora de plasmarla en la viñeta y, en general esa parte queda un poco plana, recordando en la segunda parte de la novela gráfica más al abordaje visualmente plano de la tercera película del ciclo cinematográfico original, Huida del planeta de los simios.


miércoles, 19 de julio de 2023

STAR TREK: EL DÍA QUE BARBIE INVADIÓ LA NAVE ENTERPRISE

 ¡Cáspita! Repasando capítulos de Star Trek, la serie clásica, me he tropezado con uno que me lleva a sospechar que la campaña promocional de Barbie lleva gestándose desde los años sesenta... 





Y Barbie llegó hasta donde nadie había podido llegar... 

OPPENHEIMER Y BARBIE CRÍTICAS ESCRITAS EN REVISTA ACCIÓNCINE

 ¡HeimerBarbie en Accióncine!

Crítica Barbie ★★★ (2023) por MJP - AccionCine

Crítica Oppenheimer ★★★★★ (2023) por M.J.P - AccionCine







Crítica OPPENHEIMER (2023) ★★★★★ SIN SPOILERS review

Crítica BARBIE (2023) ★★★ SIN SPOILERS review

Crítica a la carta de DRIVE (2011) ★★★★ review

CIENCIA FICCIÓN Y PUBLICIDAD: UNA SÁTIRA NECESARIA

 


Hoy he empezado a leer la secuela de Mercaderes del espacio, la novela de Pohl y Kornbluth, escrita por el primero en solitario unas décadas después, y sigue intacto el discurso satírico que impulsaba el original, hoy más actual que nunca. 

La guerra de los mercaderes. 

Aquí dejo una muestra. 

Somos títeres de nuestros deseos y esclavos de nuestros miedos, fácilmente manipulables porque en el fondo nos encantan que nos manipulen y nos digan lo que tenemos que comprar y desear y comprar. 




sábado, 15 de julio de 2023

FRANCISCO IBÁÑEZ: REY DE LAS VIÑETAS Y DE LA RISA

 Acabo de enterarme de la muerte de uno de los creadores de cómic españoles que más ha influido en mi manera de ver la vida bajo el filtro sanador de la risa. Un maestro de la comedia expresada y desarrollada en viñetas. 

Ha fallecido a sus 87 años un Francisco Ibáñez al que le debo una parte importante de la poca cordura que me ha mantenido en el lado menos incómodo de la vida. 

Podría encadenar aquí piropos superlativos a su enorme trabajo y aporte a horas de felicidad de varias generaciones. Podría enumerar sus muchos méritos como narrador y cronista fiel de todas esas características que nos definen como seres humanos en conflicto expresadas a través de sus populares criaturas. Podría analizar, y sin duda a eso dedicaré unos cuantos post cuando pasen unos días, sus muchos aportes al lenguaje del cómic, tan numerosos y variados que bien merecen que se le dediquen unos cuantos textos de reflexión a su dominio absoluto de las artes del absurdo y el esperpento como herramientas de crítica social constructiva, blanca, para todos los públicos y, lo más importante, siempre sin odios, sin mala leche, siempre celebrando la vida y sus peculiaridades como lo que siempre debería ser: una fiesta.

Ibáñez era un maestro de la celebración del error y el disparate pero no por ello perdía el ojo crítico para definirnos a través de las extremas peripecias de sus personajes. Era un mago de la inverosimilitud puesta al servicio de la verdad. 

Pero sobre todo eso, era, es y será un alimento esencial para muchas generaciones de lectores, uno de esos compañeros de viaje, uno de esos amigos a los que nunca llegas a conocer en persona, pero cuyas ocurrencias creativas celebras como si las escucharás de ese colega o ese compinche de cañas o cafés con el que compartes una de las partes más importantes y sanas de tu vida: tu tiempo de ocio. 

Creo que ahora mismo muchos de sus seguidores estamos sintiendo su pérdida,  pero por encima de eso sentimos algo que sospecho a él le hubiera gustado más: el agradecimiento por todo su trabajo y la necesidad de celebrar sus viñetas, celebrar haberlo conocido a través de sus personajes y sus historietas.

Creo que el mejor homenaje que podemos hacerle y el que más  le complacería es ponernos a leer ahora mismo uno de sus comics y celebrar con unas cuantas risas sus inagotables ocurrencias. 

Descanse en paz, maestro. Ha sido, es y será siempre un placer seguir compartiendo mi tiempo de ocio con usted y con sus criaturas.



SÍMBOLOS: ENTRE LA FARSA Y LA MANIPULACIÓN

 Paseo por el Museo Arqueológico rebuscando en el pasado respuestas para el presente y me saluda esta muestra de manipulación falsaria plenamente actual aunque pertenezca a otra época. 


Es toda una lección y un aviso para mi trabajo como periodista, como crítico  de cine y como profesor de análisis fílmico. Una señal de alarma contra el exceso y la manipulación de la interpretación.

Un ejemplo de paréntesis de mentira cuidadosamente oculto en una pretendida verdad. 

Un ejemplo de manipulación interesada para todos los que en nuestros días nos venden sus farsas, sus miedos, sus dudas y sus manías sectarias afirmando que todo aquello que predican formaba ya parte de todo aquello que nos resulta bello o admirable, o en todo aquello  que nos repugna en nuestro pasado histórico. 

Me refiero a toda esa gentecilla triste que se inventa símbolos donde no los hay para vender su mensaje manipulador que es siempre el mismo y ni siquiera posee la cualidad de lo insólito, porque repiten como loros gritones aquello que les contaron cuando les lavaron el cerebro. 

Estos intérpretes son en realidad unos ladrones de nuestros propios pensamientos, de nuestras propias conclusiones y consecuentemente de nuestra legítima y absolutamente innegociable libertad para pensar lo que nos dé la puñetera gana. 


Yo podría deciros que esto es mi propuesta abstracta de representación de una fabulosa e interminable pierna femenina que me obsesiona, o la simplificación de un río del Congo a través  de los ojos de un alienígena que llega a la Tierra pensando que todo en nuestro planeta es de color de rosa. Pero en realidad es un error a la hora de intentar fotografiar la pieza que hay más arriba. 

Que no te engañen. No compres sus farsas. No seas presa de la vagancia dominante en nuestro tiempo y piensa por tu cuenta. 

ROBOT+ TAXI +ZAPATOS DE TACÓN= IMAGINACIÓN

 A cualquiera que le guste imaginar lo inimaginable le sobra con sumar un robot y un taxi con una puerta abierta para tener una historia que contar en la cabeza.

Una pista: la puerta abierta del taxi es una invitación a la imaginación y el centro de todo el relato.

Cualquiera que tropiece al salir de casa -empleo mucho esto de tropezar porque estoy convencido de que la vida es ir tropezando con cosas que no tenías pensadas de antemano, y si todo lo que te pasa ya lo habías planificado/pensado/calculado de antemano te compadezco porque debes aburrirte mucho-, con unos zapatos de tacón sobre una papelera atada a una farola debería tener casi de inmediato cinco historias completamente diferentes que contar partiendo de esa imagen, incluyendo más de una o de dos relacionadas con sexo, y no solo porque algunos vean en el zapato una vagina y en el tacón un pene. 

Yo por ejemplo veo unidas a esos zapatos un par de esbeltas piernas y también un tipo o tipa atrapado entre las mismas del mismo modo que la papelera está atada a la farola. 

Y si uno esa foto de los zapatos con esta otra, hasta puede que me las apañe para sacar de la chistera de la imaginación una fábula de serie negra en la que la mujer fatal responde por el nombre de Laura pero nunca acaba de materializarse, porque todo sueño cuando se materializa pierde su evocador poder de seducción.

Ignoro si todo esto le será útil a alguien o si es una solemne gilipollez y para ser sincero tampoco me importa. Yo he pasado un rato entretenido escribiéndolo. 


HOT WHEELS HEMI CUDA CHRYSLER