lunes, 4 de agosto de 2025

Cómic: Nikolai Dante. La bestia de Rudinshtein

 

Nikolai Dante es uno de esos personajes que devuelve la confianza en los cómics como instrumento de ocio y entretenimiento y además es un modelo de la imaginación y la capacidad para proponer sorpresas dentro de la fusión de géneros que está echándose en falta últimamente en cine, televisión y viñetas. 

Talento es la clave. Como siempre. Acompañado de ganas e ilusión por el trabajo que haces, la actividad a la que te dedicas. 

Y de todo eso hay mucho en esta recopilación de algunas de las historias cortas más significativas de este personaje que es un muy digno hijo del mejor estilo y aportes de la revista británica 2000 A.D., en cuyas páginas brillan personajes esenciales de la cultura de las viñetas como Juez Dredd, Perro de estroncio, los cazadores de dinosaurios de la serie Flesh, Némesis The Warlock, del que ya he comentado cosas en este blog, o Rogue Trooper, entre muchos otros. 

La brillantez del mejor cómic británico se manifiesta en este recopilatorio con guiones de Robbie Morrison y dos estilos alternativos y con personalidad propia en los dibujos de John Burns, que recuerdan más una de las influencias de esta colección y personajes, las gloriosas historietas de El Imperio de Trigan, muy presentes también en el concepto de los guiones, y el expresivo Simon Fraser, maestro del gesto de sus personajes, más siniestro y menos pictórico, capaz de definir a un personaje simplemente dibujando una de esas miradas cínicas de estar asqueado de todo y por encima del bien y del mal que los caracterizan. 

Esa alternancia en el arte es una de las mejores características de este tomo recopilatorio, que en justicia debo confesar que conseguí merced a que siempre llevo un buen compañero de caza de cómics que tiene más vista, talento e instinto que yo para identificar lo bueno en la selva de las viñetas, mi colega Telly Chavalas.

No falla, y sabe mucho más de todo esto que yo. 

Los creadores de este cómic bucean en la historia de Rusia para edificar un entorno real sobre el que edificar su universo de ficción alternativo, retro futurista y asentado sobre un astuto juego de ucronía continuada en una colección de tramas en las que cabe todo y la sorpresa al volver la página está garantizada, desde la sátira de Wonder  Woman al viaje al infierno del gulag, desde los tonos de Espada y Brujería en una Mongolia alternativa y sumisa en la barbarie a las historias de terror con bestias asesinas, de la ciencia ficción a las aventuras de capa y espada desdobladas en pesadilla ciberpunk. 

Nikolai Dante es un puzle que se va resolviendo y reinventando en cada relato, respaldado por un amplio bagaje de recursos y una personalidad que camina por la delgada linea roja presentándose como un híbrido entre 007, Tony Stark, Han Solo y Errol Flynn, cóctel que visualmente sale adelante como epicentro de una sátira del héroe temerario en una propuesta poderosamente influida por los relatos y novelas cortas del pulp. 




domingo, 3 de agosto de 2025

Libro. La luna en el arroyo, de David Goodis. Novela canalla.

 

Presentada, como su autor, bajo el paraguas de malditismo, etiqueta de la que reniego porque malditos en esta vida somos todos, de un modo u otro, y además prefiero llamarla novela canalla y de perdedores, renunciando así a columpiarme en el adorno poético, que siempre me suena a justificación escapista, con pose de cigarrito a medio fumar en la boca y guitarrita llorona entre las manos, no recomiendo esta novela porque la haya acompañado el silencio, la incomprensión, la falta de puntería y criterio o la ceguera del rebaño editorial, sino porque es una novela cabrona, que te deja mal cuerpo, que se lee desde la crispación compartida con el protagonista y apretando como él los puños al comprobar que ni el cielo ni el inferno van a librarnos del lugar del que procedemos, en el que nos cocinamos como los cabrones que somos, y al que escupimos cada vez que jugamos a engañarnos pensando que todos somos iguales y vivimos en una sociedad justa. 

Esta novela solo puede leerse desde la mirada del perro apaleado que disfruta recibiendo palizas. Solo puede leerse de la misma manera sadomasoquista en que la escribió su autor, desde su ira y su frustración de perdedor que asomó el hocico en la seductora y falsa industria del oropel audiovisual que fue y sigue siendo Hollywood y tras una sola cucharada de la miel de la gloria con la adaptación de Senda tenebrosa (1946, Lauren Bacall y Humphrey Bogart sometido a un repaso de chapa y pintura de su jeta y en plano subjetivo la mitad de la película), fue expulsado de la misma con una gran patada en el culo. 

Goodis y los lectores somos aquí al mismo tiempo Kerrigan, el brutal protagonista roto, más cabrón y más duro que cualquier otra bestia de la novela negra, Channing, el hombre al que le gusta ser maltratado por sus parejas, Frank, el tumefacto alcohólico atrapado en un terrible momento del pasado del que apenas tiene conciencia. Los tres personajes comparten un vínculo con el autor en una metáfora de la culpa que persigue a toda la galería que habita o frecuenta la canallesca y autodestructiva calle Vernon, en la que transcurre la mayor parte de la historia. 

Así que no, La luna en el arroyo no es una novela maldita, es una novela cabrona.

Tan cabrona y canalla como esencial, cuya naturaleza no nos permite dejar de leerla para escapar a cualquier otro lugar que no sea la calle Vernon, en la que todos quedamos atrapados, porque de una forma u otra todos somos hijos de nuestra propia versión de la calle Vernon. 

Y si están buscando un culpable, olvídenlo. No lo hay, o en todo caso culpables somos todos. 

Y no hay cucharadas de miel para ninguno de nosotros. 


viernes, 1 de agosto de 2025

Foto: naturaleza vivamuerta




Libro: Keanu Reeves, China Miéville y la Unutología de BRZRKR


El cómic BRZKR, creado por Keanu Reeves y Matt Kindt con dibujos de Ron Garney y publicado en Marzo de 2021, evoluciona hacia la novela de ciencia ficción con este libro de otro lugar en el que Reeves se ha buscado a un ilustre compañero de viaje para esta aventura literaria, China Miéville, uno de los maestros de la ciencia ficción contemporánea, para profundizar en la Unutología, el estudio de Unutu, el guerrero inmortal capaz de regenerarse y resucitar y una otra vez. 

La novela hace hincapié en la naturaleza de heraldo de la muerte de Unutu, apodado B, entrando en territorios que no exploraba tan sólidamente el primer arco argumental de la propuesta de las viñetas, lo que le permite poner en cuestión y renovar toda la mitología del personaje desde un nuevo punto de vista. De manera que los seguidores del comic BRZRKR pueden entrar tranquilos en la aventura que supone la lectura de esta novela porque no les van a contar más de lo mismo. 

La novela desarrolla además líneas argumentales paralelas no exploradas en el primer arco del comic sobre los personajes que rodean a B, lo que permite abrir nuevas puertas y ventanas que oxigenan el universo de ficción que ya conocemos, lanzado a la exploración de otros caminos alternativos, respetuosos con el original pero al mismo tiempo dotados de su propia personalidad, como no podía ser menos en manos de China Miéville. 

El resultado es un juego metafórico sobre la curiosidad, la ignorancia y el miedo a lo desconocido hilado con la forja de religiones y contra religiones que mantienen un pulso entre la idea de la vida y la idea de la muerte. Ambas se materializan en personajes cuya pertenencia a la tradicional estructura de héroes y villanos, protagonistas y antagonistas, queda puesta en cuestión continuamente por una mirada escéptica muy saludable desde el punto de vista de la reflexión. En la misma puede verse reflejada la humanidad de cualquier época, siempre abocada a entregarse a la creación de dioses y demonios para adquirir una falsa calma con esos placebos ante el abismo del miedo a la muerte. 

Profundizar y contar lo que no se podía o quería contar en el comic, o quizá atender al desarrollo posterior de ideas desde la premisa inicial de las viñetas, permite entrar en la exploración de la dualidad de percepción de Unutu, que puede ser un asesino, y B, un socio guerrero de las operaciones encubiertas de un gobierno corrupto, abriendo además ventanas a su pasado, a través del enigmático puerco ciervo, una mascota letal que le persigue al mismo tiempo atrapada en su dual naturaleza de compañero y antagonista, y de la que merece la pena qué representa metafóricamente hablando, ¿quizá la naturaleza más primaria y brutal de Unutu?, junto con el pasado sentimental del inmortal protagonista asociado a distintos personajes clave de su pasado, claves que contribuyen a redefinirlo psicológica y socialmente. 

En algún momento de la lectura he caído en la tentación de recordar la leyenda del Minotauro al pensar en ese laberinto que forman las instalaciones del complejo de investigación con fines militares, en el que Unutu es un Teseo que se mira en el espejo del Minotauro representado por el puerco ciervo, con sus propios compañeros convirtiéndose en víctimas de un sangriento sacrificio. 


jueves, 31 de julio de 2025

Libro. El jardín de las bestias: La inercia hacia la barbarie

 


La normalización de la violencia en una sociedad lanzada hacia el abismo preside este libro.
 Erik Larson describe con el talento de un novelista de intriga pero sin apartarse en ningún momento de la reconstrucción histórica de una época clave dfl siglo veinte lo que podríamos calificar como el prólogo de la Segunda Guerra Mundial. 
Larson nos traslada a Berlín en la crucial etapa de primeros pasos del nazismo en el poder: 1933-1934.
El viaje que nos propone sigue los pasos del embajador de los Estados Unidos en Alemania, William E. Dodd. 
A sus 64 años este profesor de Historia de Chicago acepta entrar tardíamente en una carrera diplomática en la que sus nuevos colegas del Servicio Exterior de Estados Unidos le consideran un torpe advenedizo y le dejaron totalmente totalmente vendido ante un régimen nazi que ganaba poder y preparaba ya la guerra liderado por Adolfo Hitler. 
Aceptando la llamada para aceptar el puesto de un presidente Roosevelt que era un convencido intervencionista en secreto  obligado a gobernar un país en el que el 95 por ciento de la población era aislacionista, y cuyos altos cargos pensaban que en Alemania no estaba ocurriendo nada preocupante, salvo el retraso en el pago de la deuda que había contraído con Estados Unidos, 1200 millones de dólares, Dodd era un idealista de costumbres  frugales que no estaba preparado para hacerse cargo de esa embajada que nadie quería aceptar. 
A pesar de tenerlo todo en contra, fue el primer cargo del gobierno de los Estados Unidos que supo advertir del rearme de Alemania y de la amenaza que suponía incluso antes de que Hitler alcanzará el poder absoluto tras la muerte de Hindenburg. 
La explicación de por qué no fue tomado en serio por sus superiores, que de ese modo de convirtieron en cómplices de la catástrofe a través de la equivocada política de apaciguamiento, el origen de esa ceguera interesada y oportunista era sencillo: Estados Unidos estaba saliendo de la Gran Depresión y eligió ver en la calificada como revolución alemana del nacionalsocialismo una idealizada fórmula para salir de los problemas económicos y sanear un país que estaba hundido. 
No vieron lo que estaba ocurriendo porque no quisieron verlo.
Y si en todo caso algo de eso los alarmaba, eligieron mirar hacia otro lado pensando que el gobierno nacionalsocialista no podía durar. 
Sus propias culpas, mentiras, filias y fobias les pusieron una cómoda venda en los ojos para que no cayeran en la tentación de hacer frente a sus propios errores.
Y antes de que se dieran cuenta ya fue demasiado tarde para hacer nada. 
Dodd lo vio venir y no le escucharon.
El libro es por tanto una mirada a la Historia que sirve muy bien como viaje a los primeros tiempos de la Alemania de Hitler, que revela o asienta muchos datos clave sobre la lucha por el poder de las distintas facciones y personalidades en esa etapa de despegue del nazismo, pero es también una herramienta de reflexión geopolítica sobre cualquier otra época y muy útil además a la hora de reflexionar sobre nuestra actualidad. 
Su dosis de información sobre todo eso consigue que incluso pase por alto esas pinceladas dedicadas a las peripecias erótico festivas de la hija del embajador revestidas de romances, que contrastan en mi opinión negativamente con el resto. Opino 
entre tanto ramaje sentimental el libro trata más superficialmente la evolución de Martha Dodd desde su inicial simpatía por el nacionalsocialismo a ser contactada por el NKVD para que ejerciera como espía al servicio de la Unión Soviética. 
Pienso que es ahí donde el libro elige ser más novela que Historia. 



domingo, 6 de julio de 2025

sábado, 5 de julio de 2025

Ciencia ficción: Precaución: ¡Inflamable!


Thomas N. Scortia, el autor de uno de los libros en los que se inspiró la taquillera película El coloso en llamas, que disfruté en los días de su estreno siendo un adolescente de los setenta, propone en esta antología de relatos 17 visiones de la ciencia ficción en otros tantos relatos cortos. 

Tal como señala Carlo Frabetti en su breve introducción ara esta antología, hay algo del tono apocalíptico de Edgar Allan Poe en la mayoría de los relatos, y no solo en el que rinde homenaje a esa joya de la literatura y el horror que es La máscara de la muerte roja, traducida por Scortia a la ciencia ficción en su pesadilla de Marte terraformado para el segundo mejor relato de la colección: Vieja, vieja muerte en Nueva, Nueva Venecia, solo superado por el mejor relato del libro que es El fatigado río, un auténtico paseo por el laberinto de la vejez, el amor y el anhelo de muerte en el que aborda el complicado tema de la eutanasia ya en 1973, al tiempo que perfila una visión de colapso moral y social de nuestra especie.

Pero además de esa predisposición para manejar estos cuentos para adultos desde una notable astucia y eficacia narrativa que hace de ellos una buena escuela para narradores y una buena lectura para aficionados al género y al relato corto, Scortia manifiesta una peculiar habilidad para abocetar en los mismos claves sociológicas y psicológicas muy de reveladoras del mundo contemporáneo en el que se publicaron estas historias -entre 1954 y 1973-, con una dominante en sus temas que es la creciente sensación de fracaso y soledad a nivel tanto individual como colectivo. 

En sus relatos hay desde alusiones a la frustración y la inseguridad sexual en una sociedad de consumo como la que muestran Cuando llegué a Phoenix, Una rubia en el congelador, Narciso en flor y ¡Vaya, Wurlitzer! ¡Es un papá!,  a sólidos y muy distintos paseos por paisajes de soledad como Transformación, Cuando escuche la señal y Costilla de mujer. 

Al mismo tiempo se muestra como un buen tejedor de intrigas breves pero contundentes, o mejor dicho, de la comprobada eficacia de la brevedad en el relato de intriga en Precaución: ¡Inflamable!, Aunque caiga un gorrión, La última guerra, El pez Judas y La esposa del Premier, que tanto me ha recordado el asesinato de Kennedy y las teorías de conspiración que lo rodean, quinteto marcado por comienzos que atrapan y desenlaces que van más allá de la sorpresa para afincarse en un sentimiento de lacónico fatalismo existencial. 





Manga: Shark Panic, digna heredera de Tiburón en viñetas

  Está mañana llegaba a librerías uno de los mangas que con más interés esperaba en este verano: Shark Panic, de Tsukasa Saimura. Homenaje a...