domingo, 9 de marzo de 2025

CIENCIA FICCIÓN Y CONFINAMIENTO: LA CIUDAD Y LAS ESTRELLAS

 

    "Bello es contemplar la sombras de color en los planetas de la luz eterna". 
    Hace cinco años estábamos al borde del confinamiento como consecuencia de la pandemia de COVID-19. 
    Hoy desde aquí os propongo una pesadilla futurista de confinamiento a escala global llevada al territorio de la ciencia ficción, publicada en 1956 (y en España en la colección Nebulae de Edhasa. Su autor, el gran Arthur C. Clarke, al mismo tiempo elabora una propuesta que me lleva a pensar en hasta qué punto La ciudad y las estrellas es una especie de prólogo del cruce de Clarke con Stanley Kubrick y la Capilla Sixtina de la ciencia ficción cinematográfica, 2001: Una odisea del espacio, sirviendo al mismo tiempo como inspiración y anticipo en el viaje de los protagonistas a otra peripecia argumental posterior que pasó de la literatura al cine La fuga de Logan (1976). 
    Clarke parece buscar aquí en sus descripciones encuadres de naturaleza cinematográfica para definir una sociedad humana cobarde y derrotada por el miedo, dispuesta a encerrare en sí misma y negarse el futuro a base de permanecer en bucle de seguridad en una zona de confort que no es otra cosa que estancamiento. 
    Veo en esta novela una buena muestra de ciencia ficción con ambición audiovisual y cinematográfica quizá inadvertida por el propio autor, pero ejemplar en su desarrollo, y por la que se manifiestan párrafos reveladores, como el que comienza el capítulo 8: "La imagen de la pantalla-monitor se desvaneció en cuanto Alvin retiró las manos del panel de control y despejó los circuitos. Por un momento permaneció inmóvil, contemplando el rectángulo negro que había absorbido su atención durante tantas semanas. Mientras circunnavegaba su mundo, por esa pantalla había desfilado cada metro cuadrado del muro exterior de Diaspar. Con la única excepción de Kedron, conocía mejor que nadie la ciudad, y ahora sabía que no había modo de franquear esos muros". 


COMIC DE SUPERHÉROES: RICK VEITCH PIONERO DE LA VERDADERA REINVENCIÓN DEL GÉNERO

 


    Ahora que los superhéroes están de capa caída o repitiéndose con más frecuencia de lo que manda el mínimo de vergüenza, masticando una y otra vez lo mismo que nos llevan contando desde quizá hace ya demasiado tiempo, y con poca habilidad y originalidad para ni siquiera plantearse una necesaria renovación de cara a su supervivencia, es bueno repasar este tomo que me ha hecho llegar mi colega Telly_Chavalas, en el cual, como bien explica Alan Moore, el visionario Rick Veitch fue pionero en plantear las propuestas de decadencia y crítica de la narrativa super heroica incluso antes que el propio Alan Moore en Watchmen y Frank Miller en Batman: El regreso del señor de la noche
    Por cierto, en Uno Veitch también se adelantó a muchos de los recursos de cambio y madurez en modo más oscuro de los personajes aplicados a los Ultimates de Marvel, así que recomiendo la revisión de este tomo que al colega Telly, cazador y coleccionista de comics, le salió hace ya tiempo por un precio irrisorio, 3,70 euros, pero ahora está circulando a precio más alto por los mercados de segunda mano. 

sábado, 1 de marzo de 2025

LA ISLA DE LAS PESADILLAS:TERROR FALSAMENTE INGENUO

 


La temible y perversa imaginación de los cuentos trasladada de lo infantil a lo adulto en una colección de relatos inquietantes y crueles capaces de tatuar a cuchillo el escalofrío psicotrópico en las córneas del lector. 

Hideshi Hino es un monstruo y eso nos complace. 


domingo, 23 de febrero de 2025

LOS SEDUCTORES: IMPRESCINDIBLE NOVELA NEGRA CON VOCACIÓN DE REPORTAJE Y DENUNCIA

 


    Joyce Carol Oates ha definido a James Ellroy como "el Dostoiewski americano", pero yo creo que lleva años siendo algo mucho mejor: el pocero más astuto y literariamente mejor dotado para zambullirse y retratar en sus novelas la fosa séptica que constituye el lado más oscuro de Estados Unidos en el siglo XX, y como de aquellos polvos se hicieron estos lodos, sirve como cuna de la aceleración hacia el ocaso del imperio a la que ahora estamos asistiendo en el siglo XXI. 

    Todos los imperios caen, y Ellroy es el cronista de la caída del imperio estadounidense desde hace años, pero en esta novela se ha superado a sí mismo, elaborando un monólogo intenso, absolutamente adictivo, de su protagonista, el detective profunda y voluntariosamente corrupto Fred Otash, que abarca 527 páginas de lectura absolutamente adictiva. Y al terminar la lectura de esta tormenta imparable habitada por numerosos personajes en un punto de giro esencial de la historia de Estados Unidos, la muerte de Marilyn Monroe como prólogo de la caída de ese nuevo reino de Camelot vendido por la propaganda de la administración Kennedy en la Casa Blanca. 
    Y lo mejor es que aún me quedan ganas de volver a comenzar con la novela en una segunda lectura, recorriendo nuevamente el camino hacia el Calvario del amplio reparto de personajes que habitan esta historia en su caída desde las más altas cumbres del falso glamour de un Hollywood materializado en la cara oculta de la vida privada y decadente de sus frustradas estrellas y en la debacle anunciada de los estudios 20Th Century Fox ante el fracaso de la superproducción Cleopatra. 
    Volveré a leer la novela no tardando mucho entre otras cosas para tratar de confirmar mi impresión de que siguiendo la pista del acechador voyeur corrompido Fred Otash el propio James Ellroy no solo revela su juego con el lado más oscuro de sí mismo rizando el rizo en la realización de una especie de autorretrato de frontera entre la realidad y la ficción, sino que también deja entrever su propia técnica, herramientas, recursos, manías y secretos como escritor. 
    La encuesta policial de Los seductores es una de las más exhaustivas, tensas y asfixiantes que ha propuesto Ellroy a sus lectores y que por otra parte parece haberse impuesto a sí mismo como escritor a modo de penitencia por todos los laberintos siniestros en los que ha venido describiendo el lado más corrupto y miserable de la historia de los Estados Unidos y sus monstruos en el siglo veinte, padres de los monstruos que pueblan ahora su siglo XXI. 
    Su trama nos lleva hasta el mes de agosto de 1962 tras un prólogo significativamente funerario que habla ya del protagonismo de la muerte en esta nueva pesadilla urbanita, sin duda una de las más absorbentes que ha ideado James Ellroy a lo largo de su carrera. 
    Y la muerte de Marilyn Monroe solo es el principio de un relato en el que la pesadilla global de unos Estados Unidos donde el sueño surgido de la victoria tras la Segunda Guerra Mundial empieza a hacerse pedazos definitivamente se da cita con el camino de culpa y confesión que recorre el protagonista viviendo en la pesadilla de los abusos y manipulaciones de un gobierno bajo la capa de una democracia en crisis, lo que me lleva a pensar que las alusiones a la República de Weimar en Alemania son mucho más reveladoras en esta nueva muestra del desbordante talento de Ellroy para rasgar el velo de la propaganda del "sueño americano" mostrando los rincones más oscuros tras la farsa idealizada de Hollywood como fábrica productora de propaganda en cadena, mientras dedica una parte de su intriga policial a denunciar el uso de los medios de comunicación más rastreros como herramienta de desinformación en las políticas de entretenimiento y cortina de humo. 
    

domingo, 16 de febrero de 2025

LAS CRUZADAS: EL MEJOR LIBRO

La mejor oportunidad de leer algo diferente sobre una historia de las cruzadas más crítica y objetiva, que además es perfectamente extrapolable a muchos otros fenómenos y momentos históricos de nuestro pasado. 

Una buena ración de reflexión y mucho que pensar sobre un fenómeno de conspiraciones y desinformación que lamentablemente sigue caracterizando a nuestra sociedad. 

Ademas, este libro es un excelente ejemplo de aplicación de la geopolítica del siglo XI al XIII. 

JESSE JAMES: LA MEJOR PELÍCULA

 


Robert Duvall le roba la película al productor y supuesto protagonista, Cliff Robertson, para construir la mejor versión cinematográfica del mítico Jesse Jamed, del que su hermano, en una de las frases más divertidas de la película, afirma:"Jesse es prácticamente un santo".

Tan desmitificadora y gamberra como el propio personaje y el trabajo de su actor, esta comedia negra sobre los iconos del lejano y salvaje oeste es la mejor y más madura versión de los personajes que retrata y de la farsa de las leyendas del western enfrentadas a una realidad que pone saludablemente en cuestión los antecedentes del género. 

Como aficionado al western, salido está película como un saludable y muy necesario soplo de aire fresco. 



Manga: Shark Panic, digna heredera de Tiburón en viñetas

  Está mañana llegaba a librerías uno de los mangas que con más interés esperaba en este verano: Shark Panic, de Tsukasa Saimura. Homenaje a...